Radares fijos
Radares de semáforo: Se trata de pequeñas cámaras de color negro listas para poner multas si un vehículo se ha saltado el semáforo o si ha sobrepasado el límite de velocidad. Sólo los hay en las ciudades.
Radares cabina: Están situados en las medianas y los arcenes de las carreteras. Se tratan de cajas metálicas verdes o blancas de aproximadamente metro y medio de altura.
Radares de tramo: Están instalados en los pórticos y miden la velocidad que han llevado los vehículos entre dos puntos. De momento están en pruebas y no nos pueden poner una multa con ellos.